miércoles, 31 de mayo de 2017

Los consejos de la abuela I

Todos hemos pasado momentos intensos en las partidas de rol en vivo, las cuales nos sobrepasan y nos descontrolan. El hecho de dar ideas y trucos para sentirnos más seguros y controlarnos en las escenas, hace que vayamos más tranquilos y la historia que se crea sea mucho más creible y placentera. También te puede ahorrar la sensación de "haberla cagado" y que te tires cuatro días pensando que "lo podrías haber hecho mejor".

Voy a dar mis pequeños trucos de rolera vieja...

- Tensión y risa.
Hay momentos muy muy tensos, donde se pone en juego, de repente y sin avisar, una información muy delirante y sorprendentemente curiosa, además de intensa y hasta surrealista, y no eres capaz de aguantar la risa. Todo te parece una película cruce entre Dalí y Uritsokidoji, mezclado con Crepúsculo y algo de una de Esteso.Vamos, que sientes asco, tensión, tristeza y te descojonas viva pensando en lo retorcido del máster... Mi recomendación es que te tapes la boca y la cara con las manos, sobre todo la boca. Puedes hacer que lloras, que vomitas... gírate de espaldas a la gente y descojonate viva y aprovecha para descargar ese punto cómico, porque si alguien te ve, se rompe la magia, porque normalmente la risa gana siempre y la tensión desaparece. Prueba de controlar y modificar esa risa y que parezca muecas, arcadas, lloros, etc.

- Tristeza.
Muchas veces no encontramos el "drama" interior para darlo todo en una escena. Es normal, no somos actores/actrices. A veces ni conectas con ese sentimiento y estás pensando en la tesis que tienes que acabar en casa, en la colada que está colgada  y está lloviendo, y/o en ese tí@ que le queda tan y tan bien la cota de malla... No puedes, no quieres, qué sé yo... En esos casos intenta sollozar, grita, berrea, cógete los ojos, tápatelos con una mano, con las dos, dramatiza tu cuerpo en vez de sentirlo de dentro a fuera, será de fuera a dentro. Llegarás a empatizar más con ese sentimiento a partir de tus propios movimientos que a partir de tus propios sentimientos.

- Ponte de acuerdo con los jugadores.
Quizás me esté repitiendo ya que esto lo he repetido en mis otras entradas, pero si sabes que tienes una relación turbulenta o complicada con algún pj, habla con el jugador fuera de juego, aunque haya empezado la partida. No todo el mundo está preparado para recibir un 100% en acción/reacción y a veces, el que lo da todo, se siente algo incómodo pensando "si se está pasando", porque su interlocutor no está reaccionando. Sobre todo si: las tramas son sexuales, pasionales, de odio profundo, de violencia... Poneros deacuerdo, cuesta muy poco y te dará mucha tranquilidad.

- La escena que se te ha ido de las manos.
Estás en una escena que se te ha ido de las manos. Va "in crescendo" y no hay forma de parar sin que "parezca raro". La tensión es tan grande que notas que te afecta en el cuerpo realmente y empiezas a temblar. ¡Atención!, porque cuando nos sucede esto, perdemos el control sobre el personaje y puede suceder y sucede que nos colapsamos y no sabemos qué hacer. Ahí puedes dar un portazo y salir de esa escena como en las películas. Exagera y abandona ese lugar, porque te estás metiendo tanto, que tu cuerpo está reaccionando, pero es posible que tu cerebro, no. Haz ver que te desfogas con algo, que gritas al universo... eso da mucho juego, porque alguien te intentará ayudar y le puedes llegar a contar "tu mayor secreto". ¿Quién estará atento/a a la escena? ¿Quién la aprovechará? Baja las barreras y reparte información así, una escena que parecía que acabaría como el rosario de la aurora, acaba siendo todo "la escenota" del día.

- Has escuchado algo y/o has encontrado algo que no tienes ni idea de si lo puedes ver/coger/oir.
No hay ningún máster a mano.
Esos momentos pasan rápido. Quizás es el momento adecuado para robar algo, para mover algo, para escuchar algo, pero no sabes si la tela que hay "haciendo" de pared, daría tanto para escuchar las conversaciones o si por el contrario representa una pared de metro y medio, o mejor aún, no sabes si el objeto situado en el lavabo está en juego o no. Dependerá mucho de lo que nos han dicho los másters antes de empezar la partida, pero mi consejo es: ponlo en juego, y en cuanto veas a un máster, se lo comentas. Si es algo muy grave o que no podías hacer, el máster ya lo solucionará. Pero si sí se podía hacer, pasa a ser algo épico, una gesta de esas de "estar en el lugar adecuado, en el momento perfecto". Calibra si ese acto es importante, crucial para la partida y/o, es una chorradilla para darle juego a alguien. es obvio que si es crucial para la partida, para y respira antes de ponerlo en juego, guárdatelo y coméntalo a los másters lo antes posible. Las "tramas chorrillas" son divertidas y, normalmente dan la sal a la partida.
En todo caso, pregunta a másters ANTES de ponerlo en juego. Si es algo que no es tangible, como por ejemplo ir a algún sitio, hazlo y luego lo cuentas.

- No tengo vestuario adecuado y tengo que rolear.
Olvídate de lo que llevas puesto. Ponte detalles pintados, colgados, pulseras, algo distintivo. A veces no hace falta gastarse mucho para que el personaje sea "creible". Ponte en pose del personaje (actitud), ponte un parche, una pintura, unos colgantes, otra voz, acentos, tics... dale salsa y serás creíble sin demasiada cosa de atrezzo. Para darte ideas, mira películas donde salgan personajes del estilo. Los mejores personajes son los que son creíbles, no los que van mejor atrezzados.

- No sabes cómo poner en juego tu trama: da juego a los novatos.
Los novatos son muy útiles. No, en serio. Son personas que no tienen prejuicios acerca de las personas que juegan y como no nos conocemos tienen más facilidad para creerse la mayoría de cosas que les digas. Eso no significa que les putees, significa que les des juego, que hagas mover tus tramas a través de ellos. Siempre que he puesto tramas en juego a través de gente que ha jugado poco o nada, me han sorprendido con grandes capacidades de inventiva.

Ya sé que  momento es poco,pero cuando se me ocurran más truquitos de viejuna os lo haré saber.

Sé que no somos perfectos, que no tendríamos que exigirnos tánto, que solo es un juego, pero si al menos he podido ayudar a alguien a no comerse la olla más de lo normal y tolerable, me doy por satisfecha.

Hoy, la Abuela útil.






No hay comentarios:

Publicar un comentario